Bilbao Rugby finals 2018 deja un impacto económico directo de más de 37 millones de euros

Las principales finales de rugby por clubes que Bilbao acogió el pasado mes de mayo, Challenge Cup y Champions Cup, generaron un impacto económico directo en Euskadi de 37,66 millones de euros. En el caso de Bilbao y de Bizkaia, el impacto económico directo fue de 28,18 millones de euros, según un estudio de balance hecho público hoy por las tres instituciones vascas que formaron parte de la organización de este evento: Ayuntamiento de Bilbao, Diputación Foral de Bizkaia y Gobierno Vasco. Este proyecto supuso una inversión global por parte de las tres administraciones públicas de 525.000 euros, ampliamente recuperada debido al éxito del proyecto.
Este dato de impacto económico directo ha sido calculado en base al gasto generado por diferentes agentes, entre los que se incluye público, equipos, medios de comunicación, sponsors y la propia organización, y supone un importante incremento con respecto al impacto económico que estas finales de rugby generaron en Edimburgo en 2017. Los beneficios económicos directos para la capital escocesa se han estimaron en 23,7 millones de euros, una cantidad que de por sí ya implicaba un incremento del 58% en comparación con el impacto económico de las finales celebradas en 2016 de Lyon.
BILBAO, SEGUNDA SEDE CON MAYOR ACOGIDA EN LA HISTORIA DE LA CHALLENGE CUP
En total, 84.225 espectadores acudieron a Bilbao los días 11 y 12 de mayo para presenciar la Challenge Cup y la Champions Cup, de los cuales 50.503 asistentes procedían de fuera de Euskadi, originarios de 50 países diferentes. En el caso de las finales de Edimburgo de 2017, atrajeron a 80.000 aficionados al rugby, por lo que Bilbao ha generado una atracción mayor entre las personas aficionadas a este deporte.
Con estos datos, Bilbao se posiciona como la segunda sede con mayor acogida en la historia de la Challenge Cup, con 32.543 espectadores en San Mamés, sólo superada por Marsella, en la final del 2010. El año pasado, Edimburgo recibió 24.500 personas para presenciar la Challenge y fue, en aquel momento, la ciudad que logró una mayor entrada fuera de Francia. Con respecto a la Champions Cup, San Mamés registró un lleno absoluto con 52.282 espectadores.
En total, las dos finales pudieron verse por televisión en 115 países de todo el mundo, 225 periodistas acreditados siguieron las finales en el mismo estadio de San Mamés y se tramitaron un total de 500 solicitudes de acreditación para medios de comunicación de Irlanda, Reino Unido, Francia, Italia, Argentina, Ucrania, Rusia y Turquía, entre otros.
Además se estima que unas 1.170 personas llegaron a Bilbao como asistentes oficiales a finales de rugby, entre jugadores y miembros de los equipos finalistas, equipo de European Proffesional Club Rugby (EPCR), organización, sponsors, medios de comunicación, personal contratado específicamente para el evento y voluntariado.
ALOJAMIENTO, COMIDA Y BEBIDA, PRINCIPALES CONCEPTOS DE GASTO
Durante el fin de semana de los días 11 y 12 de mayo, las plazas hoteleras de la ciudad, del territorio y del país alcanzaron prácticamente al 100% de ocupación. Concretamente, el 85,1% de los espectadores que llegó a Bilbao para presenciar las finales optaron por alojamientos hoteleros convencionales para pernoctar, mientras que un 14,9% eligió alojarse con familiares, amigos o similares.
La estancia media en alojamientos hoteleros por parte de espectadores llegados a Bilbao desde fuera de Euskadi por motivo de las finales de rugby fue de 3,1 días. Durante ese fin de semana se ocuparon, además, 35.008 camas y se produjo un gasto medio por persona y noche en concepto de alojamiento de 153 euros.
En cuanto al gasto medio generado en Euskadi por las personas llegadas de otros lugares para presenciar las finales en Bilbao en otros conceptos, tales como comida, bebida, viajes y compras fue de 136 euros por persona y día.